lunes, 25 de julio de 2011

Capítulo 34. Espíritu del Tambucho-"Trotada con Veleteros al Morrón de Espuña"

DIA DE LA TROTADA: DOMINGO, 24 DE JULIO DE 2011

Ya llegó el día D, el de un entrenamiento muy esperado con los Veleteros para trotar hasta una altitud de 1600 para picar el Morrón de Sierra Espuña. Es el segundo en serie para entrenar la Subida al Veleta el próximo 7 de agosto. 50 k - también existe la posibilidad de hacer el Mini Veleta de 11k comenzando a unos 1800 metros de altura hasta la cima; dicen que "es precisamente el tramo más duro" y sería buena idea hacerlo a modo de reconocimiento del terreno, el clima y lo que es la carrera en sí.


Quedada con Juande a las 5.45am en la puerta de casa para ir a la Unión a recoger a Miguel, hermano de Alfonso Baseras, amigo del Tambucho - y él también por supuesto-. 6.15am "sin la ducha portátil no hay nada que hacer..."

Por el camino en coche me muestran adónde había que subir; son 21 hasta el Pozo de las Nieves y 23 hasta la cima del Morrón, saliendo de 600m de altitud, no sin antes hacerse alguna fotillo de arrancada "los altruistas" dice uno que habia sentao en el bar. "O los al-turistas, no? Con esta pinta..."

Ya estaba todo dispuesto: la estrategia correcta consistía en que Juande, Miguel, Rufino, y Bárbara "Boomer" subian a trote hasta el Morrón; Benito subiría en coche con su bici y desde arriba con la bici por el monte para entrenar, vernos a todos, hacer fotos, y al acabar la trotada bajaríamos todos en su coche vuelta al Jarro.
Cronómetros y YA...¡vámonos!

La Trotada empieza suave para ir de menos a más, juntos recortando cuando es posible


porque suben y bajan coches, es un entreno de asfalto...y me decisión por las de trail me pasará factura, me advierte Juande, pero bueno, a disfrutar de la subida que es única y seguro que será productiva e instructiva. Ahí vamos, a trote suave la primera hora ...



...rodeados de la naturaleza, con una temperatura ideal, más seca y fresquita que la que tenemos en Cartagena - unos 17 grados - y aunque aumentó con las horas, el tiempo fue perfectamente llevadero.
"No te olvides de beber, aunque no tengas sensación de sed", me advierte Juande; cada dos por tres con el pitorro de la Camel, con los bidones de bebida energética casera.
Un buen desayuno me dio para los primeros 8 kilómetros hasta tener que tirar de barritas de choco y plátano.
A la hora y veinte, empiezo a ver carteles advirtiendo de la cercanía del Area de Recreo Fuente del Hilo y de otros parajes naturales como el de un Centro de Interpretación del entorno, alguna que otra casa forestal... Veo bajar a Benito en la bici, paramos a reponer de agua la Camel en Fuente del Hilo donde se nos presenta una piara de jabalíes, unos chiquitines otros más gorditos, ahi al lado de la cantina, "porque saben que ahí hay manduca" me cuenta Benito. En el silencio, se escucha el ruidillo de las ardillas triturando piñas. "Subiendo en el coche me encuentro con un zorro asomado en la cuneta", comenta. Menos mal que iba en el coche y no en la bici, porque muerden. Durante la marcha Benito me advierte sobre unas magníficas vistas de unos bancos de nubes, que indican el haber subido por encima de los límites de lo normal; Se nota más fresco, además, por la altitud. Los aromas a pino son deliciosos la brisa de la montaña muy agradable- "Nos vemos por ahi arriba", ahora toca una pendiente algo pronunciada y luego un tramo en zigzag de unos 5 kilómetros con falsos llamos y se nota la pendiente. Juande con el de esta próxima edición irán cuatro, con unos tiempos fantásticos, pero lo más importante que las disfrutara; Miguel trece con esa pedazo trayectoria que lleva, Carmen se estrena; a ver si Benito se apunta al Tambucho...


Cae la segunda barrita; liquidados los dos bidones de energética, ya vamos agotando las existencias. Voy distraida comiendo, bebiendo mas agua, disfrutando de las vistas...y derrepente, donde esperaba ya subir hacia el Morrón, bajada hacia el Berro y al rato pienso: "un momento, esto no tiene sentido...se supone que tengo que seguir subiendo", doy media vuelta - pues ya había bajado unos 500 mts. - otros tantos para arriba. Claro, ahi en una explanada habían unos carteles sobre lo que me había indicado Miguel, "Dirección EVA-13, Pozo de las Nieves a la derecha" Va, saludo a un grupo de ciclistas que me anima, siguen subiendo mas en bici en la misma dirección, nos preguntamos de dónde salimos; ellos de Totana..."venga, ánimo que ya queda poco". ¡Arriba! o Aupa! como dicen los vascos.
¡He perdido tiempo con la bajada esa, concho! Tras haber recorrido los 21k de 23k me encuentro con los amigos; de cabeza bien, dispuesta a seguir, pero físicamente agotada, me meto en el coche de Benito apretaos y para abajo todo el mundo para reponer fuerzas - tostaditas de jamón, birra, almendritas, un platito de aceitunas, café y risas. Llegan más amigos de entrenar a lo mismo, otros grupos que han salido de diferentes puntos y acabamos todos en el mismo.

foto de la mano de Eugenio. Fin de entrenamiento reponiendo fuerzas con los Veleteros, de izquierda a derecha: Bárbara "Boomer", Rufino, Juande, Miguel y Carmen
Comentamos el entrenamiento, todos están felices de estar ahi de haber cumplido el objetivo; hablamos sobre la estrategia de carrera, sobre nuevos retos: Juande propone una vuelta a la Región de Murcia antes de que acabe el año y sobre la II GR-92; de planes para el 7 de agosto, de la trayectoria de cada uno y tras habernos recuperado con ducha portátil incluída y haber pasado tan buenos ratos nos despedimos "¡Hasta pronto!" con el Veleta a la vuelta de la esquina (yo probablemente me haga el Mini Veleta de 11k a modo de reconocimiento de la carrera).

El Pico Veleta



..¡y ahora a comer y a la playa!

2 comentarios:

  1. Hay que tomarse el veleta en serio eh, que no es ninguna broma si quereis ir medianamente preparaos, sino ireis al infierno a sufrirrrr. Saludicos.

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  2. ¡Sois unos valientes! Enhorabuena por tan buen entrenamiento, por la buena crónica y por seguir manteniendo la ilusión de crear aventuras y nuevos retos. Murcia se merece una vuelta (o dos). A ver si cuaja esa idea. ¡Me hace ilusión!

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