martes, 15 de febrero de 2011

Capítulo 8. Espíritu del Tambucho: Carigüelas y la Ruta del Secreto


romero
Al Tambucho llego más temprano de lo habitual - 5 minutos antes - y avisa Juande para que no le esperásemos hoy. Aparecen por la otra acera Pepe Paredes, Alfonso y otro chico que viene con ellos y no conozco, pero no pasa nada porque me lo presentan enseguida: Teo, hace duatlones, del Mandarache y en su último duatlon se lesionó por un tirón. Vaya marcha tiene esta gente, y gracia porque, mientras arranca el entrenamiento con la idea principal del Calvario por senda, finalmente nos decidimos por el Faro de Navidad. Llaneamos...
El ritmo con ellos siempre es bueno, a la vez que anima a mejorar la velocidad de crucero. Yendo en piña por el Perpétuo o un poco más alante topamos con Jose - que ya conozco - y otro duatloniano, Antonio - que participó en el de Lo Pagán celebrado el finde pasado. Nos saludamos y seguimos los seis, cruzándonos con un grupo de militares, tambien corriendo, saludos, ánimos y cuando llega el momento de girar hacia Quitapellejos,  Jose y Alfonso que encabezan el grupo siguen recto "¡Chacho!" grita Pepe "¿pero no íbamos al Faro?", da igual seguimos adelante. Pues nada, vámonos. Van hablando de un homenaje para el padre de Teo, que tiene 74 años y se hizo la primera edición de la Ruta. ¡Espectacular! ¡Enhorabuena, caballero!
Comienza la subida a Tentegorra..a ritmo...2 por delante, "hoy se van a contar su vida" comenta con gracia uno de los duatlones, los dos aprietan...casi consigo hacerme la subida entera corriendo. "No importa, esperan, van a beber agua también" observa Pepe. Miniparada para coger aire y seguimos," es que para coger fondo hay que ir así" recomienda Alfonso, pero yo me alegro, es,como todos los del Tambucho, un entrenamiento feliz e instructivo. La velocidad llaneando mejorará en cada salida, si se sale, claro. Hacia el Limonar bajando por la carretera de Tentegorra pasando por las ambulancias subimos el repechico y todos menos Pepe y yo tiran a Carigüelas pues hay que volver al curro. Nos despedimos y bajamos hacia un restaurante que hay por ahí abajo para tomar la Ruta del Secreto de vuelta:  todo por senda rodeando el perimetro del monte de Tentegorra, desembocando en la cuesta a la altura del cuartel: "Ahi" me indica Pepe "acaba la Ruta de las Fortalezas; dentro está la Meta, las mesas de comida y bebida para los corredores, amigos y familiares...y la fiesta. Nosotros solemos quedar en el Tambucho los sábados para trotar y hacer tramos Ruta. Este que viene subiremos al Calvario, pero la subida caminando, por si te quieres venir", me ofrece, pero como tengo Final de Cross Individual con el equipo en Jumilla el domingo - con comida de confraternización y todo - pues me apunto para el siguiente y salen a las 7.30. Nos encontramos con tanta gente corriendo, que da alegría verlos, y me asegura Pepe que cuando salen los sábados te encuentras a mucha más. "La bajada del Perpétuo ahora estupenda para soltar la pierna, ¿no?" "Venga, le tiramos". El tiempo de entrenamiento y llegada clavadito. Habremos recorrido 12 kilómetros y con objetivo conseguido: la mejora de velocidad de crucero "que llaneando vas mas fuerte" me asegura Pepe, gracias a que me marca. Lo  que decíamos en la explanada de Tentegorra, que nos vamos marcando unos a otros y así es mucho más fácil conseguir los objetivos, - Juande ha recomendado que sean 70 kilometros por semana, específico para maratón - con buenos compis de carrera y disfrutando del recorrido, que por cierto nos ha chispeado. Nos despedimos hasta el jueves, aunque ellos salen prácticamente a diario, pues "lo que suma es todo lo que haces a la semana".

No hay comentarios:

Publicar un comentario